Podríamos decir que un evento es exitoso cuando todos los elementos que intervienen en su realización funcionan correctamente y de forma sincronizada.
Sin embargo, el sonido en eventos es uno de los elementos que, si falla, puede impedir muchos de los propósitos de tu celebración. Pese a que la iluminación o la proyección de contenidos funcione a la perfección, si tu audiencia no oye en cada momento lo que debe escuchar, el mensaje del evento no llegará.
En este artículo te enseñamos las claves para gestionar el sonido en eventos. ¿Te apuntas?
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Elegir el sonido adecuado para un evento no es solamente una cuestión de calidad de los componentes, sino de las diferentes variables que se combinan. Aquí vamos a repasar lo que debes tener en cuenta:
El protagonismo del sonido en eventos será determinado en función de lo que estemos planificando, es decir, el tipo de evento.
Si es una presentación de producto o convención, lo más importante será que la voz de los ponentes o presentadores se oiga con claridad a lo largo de todo el lugar. A eso lo conocemos como inteligibilidad: la capacidad de poder entender y escuchar a la perfección el mensaje hablado. ¿De qué sirve querer comunicar algo si sólo se escucha pero no se entiende?
Pero si el evento se trata de un show artístico, entonces a la claridad debemos sumarle potencia y muchos otros elementos necesarios para que el sonido acompañe la actuación. Las emociones humanas responden a varios estímulos concretos, y en el caso concreto del sonido se podría reducir a la espectacularidad que pueden ejercer, por ejemplo, elementos sensoriales reforzados (como un buen subgrave controlado pero contundente). No sólo debe escucharse, debe emocionar.
Por el contrario, si nuestro evento se trata de una celebración, entonces el audio cumplirá una función de cortina y acompañamiento, quedando relegado a un segundo plano, a menos que esa celebración suba los decibeles y se convierta en una fiesta, donde el sonido vuelve a recobrar protagonismo.
Así pues, tener en cuenta la función que ocupará el sonido en eventos, es el primer paso antes de seguir a la próxima etapa.
El sonido es vibración que viaja por el aire y llega a nuestro oído. Por eso, los diferentes elementos con los que se pueden encontrar esas ondas sonoras en su camino juegan un papel de gran importancia.
Si el evento es al aire libre, entonces muchos otros factores externos y difíciles de controlar van a entrar en juego, como sonidos del ambiente, tráfico, y naturaleza. Además, al no estar contenido en un espacio cerrado, el sonido se va a dispersar, por lo que probablemente necesitaremos más potencia y mejor distribución de altavoces.
Cuando nuestro venue es un recinto cerrado, entonces la situación cambia. Si la construcción fue realizada originalmente para eventos (o al menos adaptada), entonces es muy probable que cuente con los elementos necesarios para la correcta distribución del sonido, evitando ecos y fugas.
Un muy buen ejemplo de esto son los auditorios y teatros, donde su construcción fue concebida para que el sonido se distribuya por todo el recinto de manera uniforme, y hasta las voces sin amplificación pueden llegar a todos los asistentes. Pero estos mismos espacios han sido diseñados para actuaciones sin grandes equipos de sonido: a veces, un teatro se convierte en un problema cuando necesitamos reproducir una banda sonora. Siempre es necesario estudiar, prevenir y dejarse aconsejar por un buen partner audiovisual como Dushow para, a veces, simplemente batir con éxito la premisa más básica.
Hay algunos espacios que ya cuentan con sistemas de sonido instalados, y en ese caso hay que corroborar si los mismos son aptos para el tipo de evento que queremos organizar, o si necesitaremos contratar o ampliarlos con equipos externos.
Algo muy importante. Si queremos guardar un registro del evento en vídeo (o solamente el sonido) es fundamental tener en cuenta todas las fuentes de donde queremos captar el sonido, para así contar con canales y dispositivos exclusivos para cada uno.
Hay ocasiones donde se desarrollan conversaciones que son audibles para los presentes, pero al no contar con micrófonos para captar a cada participante, la misma se pierde en la grabación, por ejemplo.
El material técnico audiovisual en un evento es imprescindible. En concreto, el equipo de sonido se compone de la captación, el procesado y su reproducción: un micrófono, una mesa de control y un altavoz.
A partir de aquí iremos añadiendo los periféricos necesarios para conseguir batir nuestro reto:
Más micrófonos (no todos son adecuados para absolutamente todas las fuentes).
Adaptadores de señales de línea (para instrumentos, ordenadores, reproductores musicales, entre otros).
Mesas de sonido acorde a las necesidades establecidas
Sistema de cajas acústicas adecuado para cada situación
Etc
También deberemos tener en cuenta los monitores de suelo o IEM (auriculares personales inalámbricos), las escuchas para otros miembros del equipo técnico y/o artístico... e incluso el sistema de comunicación para órdenes entre la producción, técnicos, artistas o ponentes.
Una vez vistos los factores claves y el material con el que debes contar para gestionar el sonido de tu evento. ¡Te toca ponerte manos a la obra!
Como has podido ver, el sonido es uno de los aspectos clave en tu evento. ¿Quieres conocer más aspectos y consejos técnicos que debes tener bajo control? Te recomendamos también el vídeo 5 fallos técnicos que no pueden suceder en un evento: